
El Ministerio de Seguridad Social español ha presentado recientemente un borrador de plan de nuevos tipos de cotización para autónomos para los años 2026, 2027 y 2028. La propuesta introduce tramos actualizados basados en nuevas bases mínimas de cotización. Si se acepta, las cotizaciones mensuales en 2026 podrían aumentar entre 11 y 206 euros en función de los ingresos. Y en contra de lo que cabría esperar, incluso aquellos con una facturación baja podrían ver incrementos sustanciales.
Aquí tienes un resumen de cómo podrían ser las subidas:
Estos cambios se aplicarían en 16 tramos de ingresos, con cada tramo vinculado a una "base mínima" (base mínima) diferente y, por tanto, a un nivel de cotización distinto. El borrador también contempla continuar con incrementos lineales similares hasta 2031, en línea con un acuerdo de 2022 sobre la transición a un sistema de cotizaciones ligado a la renta real.
La propuesta ha provocado reacciones agudas y encontradas entre las asociaciones que representan a los trabajadores autónomos:
Ambas asociaciones coinciden en algo: hay que evitar la rigidez en los tramos. Defienden la posibilidad de ajustar los tramos si las condiciones económicas cambian sustancialmente.
Otro punto clave de discordia son los cambios propuestos en la "cese de actividad" (ayuda por desempleo para autónomos). La propuesta de la Seguridad Social sugiere rebajar el umbral de pérdida o reducción de ingresos necesario para acceder a esa prestación, pero ATA sostiene que el ajuste es demasiado pequeño y sigue dejando muchas solicitudes denegadas injustamente.
ATA son las siglas de Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos. Fundada en 1995, ATA representa los intereses de los trabajadores autónomos de toda España. Entre sus principales funciones se encuentran:
Dado que ATA es una de las organizaciones más visibles e influyentes que representan a los trabajadores autónomos en España, su aceptación o rechazo de nuevas propuestas tiene un peso político considerable.